Embarca en el lago de Léon, donde desde hace más de un siglo una cofradía de barqueros desvela a los viajeros uno de los tesoros naturales de la región: la corriente de Huchet.

Estas pequeñas barcas de fondo plano, con capacidad para 4-6 personas, se han utilizado desde siempre para pescar en los grandes lagos y los ríos costeros landeses. En Léon, los pescadores le han dado otra utilidad: desde hace casi un siglo, transportan en ellas a amantes de la naturaleza para conocer una de las joyas naturales de la región: la corriente de Huchet.

Déjate llevar en silencio por sus aguas mansas, desde el lago de León hasta la llegada triunfal al estuario de la playa de Moliets: siete kilómetros de paseo entre las dunas, a la sombra de una galería forestal, compuesta por pinos, sauces, cipreses de los pantanos y alcornoques, donde viven más de 200 especies de aves, nutrias, visones, garzas reales, galápagos europeos y una gran cantidad de peces.

Un paraíso ecológico y mágico que ofrece una experiencia atemporal, intimista y a la vez grandiosa.

Vue aérienne du Courant d’Huchet