Unas cuantas horas o varios días lejos del mundanal ruido, sin teléfono, televisión o internet, viviendo al ritmo de una comunidad de monjes benedictinos en Chalosse… Una experiencia saludable.
De por sí, el pueblecito de Maylis invita a la desconexión: en las colinas de Chalosse, con vistas a los Pirineos, en medio de verdes campos y frondosos bosques, te sentirás a salvo, lejos de las prisas de la vida diaria, en sintonía con los demás y con tu yo interior.
Las sensaciones se multiplican al entrar en la abadía benedictina del pueblo. La pequeña comunidad de monjes cultiva y vende allí mismo la famosa planta de Maylis, con propiedades digestivas y depurativas. Ofrecen asimismo retiros espirituales. Por unos días olvida el teléfono, internet, la televisión y las preocupaciones diarias para vivir al ritmo de la comunidad: asistencia a los oficios monásticos, lecturas, momentos de recogimiento y descanso, pequeñas tareas cotidianas y paseos por Chalosse.
Así discurrirán tus días de retiro monástico. Puede hacerse de forma individual, en pareja o en grupo. La abadía acoge también a estudiantes de instituto o universitarios en preparación de exámenes, a madres de familia al límite del burn-out para una “pausa espiritual” o familias que quieran reconectar, ya sea durante unas pocas horas o varios días.
