Justo detrás de las playas atlánticas, las Landas albergan en su interior todo un conjunto de grandes lagos de aguas cristalinas, con playas de arena fina y protegidos por el bosque. Un paraíso que invita al ocio náutico, a la pesca o simplemente a bañarse y descansar. Aquí reinan la calma y la tranquilidad.

Al norte de Las Landas, cerca de la duna de Pilat, el lago de Cazaux-Sanguinet es el segundo lago más grande de Francia con una extensión de 55 km2. Justo encima se encuentra el lago de Parentis-Biscarrosse, de 35 km2, y después, hacia el sur, los lagos de Aureilhan, Léon, Soustons, Port-d’Albret, el Étang Blanc y el Étang Noir de Seignosse, o el lago marino de Hossegor. Pequeños paraísos por descubrir.

Vela, windsurf, kite-surf, wakeboard, esquí náutico, banana boat, paddle-surf o un simple paseo en barca, kayak o hidropedal… Más o menos movidos, todos los deportes náuticos pueden practicarse en casi todos los grandes lagos landeses.