Más al sur, en un apacible meandro del río Adour, se encuentra el pueblo de Port-de-Lanne, antigua etapa del comercio fluvial entre Gascuña y el puerto de Bayona. Con salida de Port-de-Lanne, numerosas rutas a pie y en bicicleta permiten impregnarse de estos paisajes tan particulares, donde el Adour marítimo se explaya en toda su longitud por la llanura antes de alcanzar los tumultuosos graves pirenaicos en Bec-du-Gave, a algunos cientos metros al sur del pueblo, para luego ir directo al océano.

Port de Lanne